La llegada del coronavirus no pudo detener la solidaridad y las ganas de ayudar en tiempos difíciles, son siempre más fuertes.
Un ejemplo de esto, es el Comedor Sonrisas que funciona en la Iglesia Transformando Vidas de nuestra ciudad, y el cual hoy está dando un plato de comida a más de 25 familias de Laprida en medio de la pandemia.
La iniciativa es una de las tantas que realiza la Iglesia, ubicada en calle Mitre 688. Actualmente, el comedor funciona martes, jueves, sábado, y domingo, llevando una vianda gratuita a la casa de quienes lo necesitan.
“Empezamos con el comedor en 2019, ayudando a los chicos que no tenían el plato de comida, trabajando sábado, domingo y feriados, pero con el tema de la pandemia solicitamos autorización para poder seguir, aplicando el protocolo y aumentando la cantidad de días, porque se necesita” contó a Oh Laprida Sergio Villarreal, integrante de la Iglesia.
Tomando las precauciones necesarias, la iniciativa tiene el apoyo de varios jóvenes, que desde temprano se acercan para cocinar.
“Los dos cocineros llegan a las 9 de la mañana a preparar todo y se van turnando, también los choferes. Tenemos un grupo de 13 o 14 personas que están trabajando. Obviamente todo esto es a pulmón” contó, Rosana Cavilla, pastora de la Iglesia.
A esto se suma el aporte solidario de comerciantes, instituciones y entidades lapridenses, así como integrantes de la Iglesia que ayudan desde casa: “”nos dejan las cosas en la puerta o nos mandan un mensajito y las buscamos”.
“También recibimos muchas donaciones de instituciones, por ejemplo la Peña de Boca, la Sociedad Rural, y muchísimos comercios, despensas, y firmas de Laprida”, cuentan.
“El comedor no tiene distinciones, nosotros no le decimos que no a nadie. Quienes realmente necesiten estamos para eso” . Para que esto funcione, son varios los vecinos que trabajan día a día de forma voluntaria: Mercedes Nuñez, María Gomez, Sandra Praiz, Federico Castro, Gretel Ryuz, María Ocampo, Camila Dries, Agostina Ballesteros, Raúl Santillán, Ruth Praiz, Adriana Rodríguez, Laura Jara, y María Praiz.
Todos ellos, dedican una parte de su tiempo, aunque haga frío, calor o llueva. “Hoy ha estado caluroso pero estamos felices de poder a ayudar a la gente”, señalaron esta mañana.
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